La vuelta a casa

LA VUELTA A CASA TRAS UNOS EJERCICIOS, RETIRO O PEREGRINACIÓN

[​IMG]

Al regresar a casa tras una experiencia intensa con el Señor, nos espera de nuevo el mundo, que no ha cambiado, aunque nuestro corazón sí lo haya hecho. El Demonio está esperándonos, presto a arrebatarnos las gracias obtenidas, enfriándonos y desanimándonos. -«No vas a ser capaz de cumplir con tus intenciones» nos dice. -«Despierta, sé realista, el mundo es demasiado crudo, no puedes vivir tan devotamente, se reirán de tí, te dejarán solo…- o más sutil: -«¡Qué buenas las intenciones que has hecho, pero ve poco a poco! No vaya a ser demasiado para tí, tampoco te vas a hacer santo en 2 días…- 

Y así, se vale de otras muchas estratagemas y excusas malignas

También hablará por boca de nuestros propios seres queridos o amigos, los más alejados de Dios e incluso católicos tibios. Igualmente se burlarán o darán malos consejos … -«¿Qué? ¿Ya te vas a hacer monja, o cura? ¿Qué ocurre, ahora te vas a pasar todo día en la iglesia rezando?
Satanás se valdrá de su lengua, como hizo con el mismo Pedro, que regañó a Jesús por querer dejarse crucificar. -¡APÁRTATE DE MI SATANÁS! – Le respondió el Señor, al que sería la mismísima roca sobre la que fundaría su Santa Iglesia. Pues en realidad no se lo decía a él, sino al Demonio que había tomado prestada su lengua para tentarle. Así mismo nosotros debemos exclamar interiormente con fuerza ese «apártate de mí» cuando veamos aparecer la cola de la Serpiente por malos pensamientos o la misma boca del prójimo. ¡Ánimo pues! Y no ceder ni un ápice en nuestras intenciones, que fue el mismo Señor el que nos las inspiró, y Dios no se muda. La Virgen y todos los santos están con nosotros. AMÉN.

Deja un comentario